El clarinete pertenece a la familia de los instrumentos de viento-madera, al igual que la flauta, el oboe y el fagot. Es un aerófono de lengüeta simple. El cuerpo del instrumento puede estar hecho de madera y su perfeccionamiento, en el siglo XIX, con un sistema de llaves mejorado lo situó en un lugar privilegiado entre los instrumentos. La belleza de su timbre lo hace apto para interpretar pasajes como solista además de ser un instrumento de enorme agilidad y sonoridad. Se trata de un instrumento nacido en el clasicismo; ninguno de los grandes nombres del Barroco (Bach, Haendel, Vivaldi) llegó a componer música para este instrumento.
Se han escrito grandes obras de cámara y conciertos para el clarinete, entre los que destaca uno de los conciertos mejor valorados de la historia, el Concierto en la mayor para clarinete y orquesta de Wolfgang Amadeus Mozart. Escuchemos su segundo movimiento, por la Orquesta de Cámara de Suecia y Martin Fröst en clarinete y dirección.
Producción: Carlos Díaz Rocca